El verano puede ser un desafío para el cuidado de los tatuajes debido a factores como la radiación solar, el sudor y el agua salada o clorada. Aquí están mis recomendaciones específicas para proteger tu tatuaje durante esta temporada:
Protector solar: Una vez que el tatuaje haya cicatrizado completamente, utiliza un protector solar SPF 50+ para prevenir la decoloración causada por los rayos UV.
Evitar exposición directa: Durante las primeras semanas después de tatuarte, cubre la zona con ropa ligera de algodón para proteger la piel sensible.
Hidratación: Mantén la piel hidratada utilizando productos sin fragancias ni alcohol.
Evitar agua excesiva: Piscinas, playas y jacuzzis están prohibidos hasta que el tatuaje esté completamente cicatrizado, ya que el agua puede introducir bacterias y causar infecciones.
El verano no tiene que ser un enemigo de los tatuajes; con los cuidados adecuados, tu diseño se mantendrá brillante y saludable.